lunes, 19 de mayo de 2008

Abofetear

Darle un bofetón cuando te la está chupando es el mejor afrodisíaco para una mujer dócil. Hace que se entone, que se sienta humillada y que la confusión se apodere de su mente. Es la confusión que le lleva a sentir un calor por todo el cuerpo y que se dirige inexorablemente hacia su clitoris (perdón por el tópico).
La primera vez que una chica me pidió que la abofeteara me sentí totalmente perdido. Por nada del mundo hubiera querido causarle ningún daño y recuerdo que pensé "Si le doy un manotazo, seguro que le rompo la mandíbula". Mi complexión es robusta (ello ayuda a crear un ambiente de dominación, lo reconozco) pero me preocupa en extremo que cualquier acción mía cause daño en un cuerpo más frágil.
En aquel momento, sin embargo, pensé rápidamente la manera de darle la bofetada de manera que sonara pero no le hiciera ningún daño estructural (es decir, que enrojeciera su mejilla pero que no afectara para nada a sus músculos o sus huesos). Lo conseguí. Ella se masturbó y se corrió enseguida. Al final, noté como sus manos delicadas cogían la mía para llevársela a la boca. Me lamió la mano (como una perrita agradecida, perdón por el tópico) y debo reconocer que, por un momento, sentí el mismo placer que sentía ella.

No hay comentarios: